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Veracruz se generan más de ocho mil toneladas diarias
Xalapa, Ver., 31 de Octubre.-
Sandra Enith Álvarez Espinosa, alumna de la Maestría en Gestión Ambiental para la Sustentabilidad de la Universidad Veracruzana (UV), desarrolló una estrategia integral de gestión de residuos sólidos urbanos (RSU) en el municipio de
Tlacolulan, con un enfoque centrado en la
sustentabilidad ambiental, la participación comunitaria y el aprovechamiento de
residuos orgánicos con potencial energético.
La estudiante de posgrado propone este proyecto a través de una metodología mixta que combina herramientas técnicas, procesos participativos y un análisis del contexto local, y por medio de él busca fortalecer las capacidades municipales para transitar hacia un modelo de gestión eficiente, justo y replicable.
Sandra Álvarez mencionó que en México más del 78 % de los residuos se depositan en
sitios de disposición final, muchos de ellos sin cumplir plenamente con la normatividad ambiental vigente.
“En Veracruz se generan más de ocho mil toneladas diarias, y numerosos
municipios rurales enfrentan rezagos importantes en infraestructura, financiamiento y capacidad técnica”, puntualizó.
La joven compartió que en Tlacolulan aún se carece de infraestructura suficiente para el
acopio y compostaje, así como de mecanismos consolidados de separación en la fuente.
El municipio es sede del relleno sanitario regional “
Potrero de García” que recibe residuos de localidades vecinas, lo cual conlleva retos logísticos en la recolección y disposición final, que derivan en la necesidad de fortalecer la coordinación intermunicipal y la participación ciudadana.
En este contexto, la alumna de posgrado planteó una alternativa sustentable que combina
educación ambiental, separación de residuos en origen y valorización orgánica que incluye su potencial energético; además, propone la creación de un modelo técnico replicable para municipios que usan el relleno.
Su metodología aborda cuatro acciones: un diagnóstico normativo, el trazo de una hoja de ruta, un plan de educación ambiental, y la implementación de una estrategia de gestión integral de residuos sólidos urbanos.
Igualmente, se elaboró un mapeo de actores clave que facilitará la creación de alianzas y acciones colaborativas entre instituciones, comunidades y funcionarios, y se estableció vinculación con autoridades locales con el objetivo de poner en marcha de un programa piloto de educación ambiental.
Sandra Álvarez manifestó que, estos avances fortalecen las bases para el diseño de una estrategia integral que aporte una nueva perspectiva a los tomadores de decisiones, mejore la eficiencia del sistema, reduzca los impactos ambientales y sociales, y promueva una gestión sustentable y colaborativa en la región.
“El correcto manejo de residuos sólidos tanto en entornos urbanos como rurales es un tema fundamental que actualmente no cuenta con un enfoque adecuado, por lo cual es primordial llevar a cabo acciones de educación ambiental en torno a ella, a fin de reducir la huella ecológica”, concluyó.